como un Frankenstein
mi sueño cibernético
algo como yo nunca vi.
El conocía todos los bailes
se programaba un romance
cuando el me veía
tu estabas observando
a través del video.
El era el hombre automático
el era el hombre automático
y tu eras el maniático
que lo construíste.
Su corazón atómico
estaba aprendiendo a sentir
lloraba lágrimas eléctricas
lo imposible fue real.
CLAUDIA CONTRERAS